Ventura corta un rabo en el Festival de Granada

Diego Ventura se ha mostrado muy entregado con los dos novillos que ha toreado en el XV Festival a beneficio de Granadown con el que se abre la temporada de la plaza de toros de Granada. Son los primeros astados que Ventura ha toreado en España después de su gran temporada en tierras americanas.

Con el primer novillo de Fermín Bohórquez, Ventura, de salida, galopó a lomos de Demonio con el que se encontró un novillo con clase, pero muy parado y con tendencia a tablas de Fermín Bohórquez. Diego fue tirando del novillo hacia los medios y colocó un primer rejón de castigo muy pequeño, debido a lo rajado que estaba ya el animal. Cambió de caballo para presentar a Buenavíbora, un nuevo caballo de la cuadra de Ventura con el que se adornó muy bien con la bandera.

Ya en banderillas y a lomos de Revuelo, fue encelando al novillo andando de costado para sacarlo hasta los medios, donde puso dos banderillas toreando muy de frente. Con Morante cuidó mucho del novillo que seguía con su tendencia a tablas. Puso también dos banderillas e hizo las delicias del público con sus tradicionales bocados. Otro caballo nuevo lució en este tercio: Sueste, con el que puso otros dos palos.

En el último tercio Ventura galopó a lomos de Don Ramón, otro ejemplar nuevo en su cuadra, con el que puso banderillas cortas con el novillo ya pegado a tablas. Falló con el rejón de muerte y tuvo que descabellar.

La afición granadina supo premiar el esfuerzo y la entrega de Ventura con una cálida ovación. De ahí que Ventura decidiera regalar un novillo, el sobrero, de Fermín Bohórquez al que se le dio la vuelta al ruedo.

Con éste, un novillo de mucha clase y bravura Diego ha armado un auténtico lío. De salida volvió a sacar a Buenavíbora, con la que puso un rejón de castigo. En banderillas sacó a Nazarí con el que puso cuatro banderillas galopando de costado a dos pistas. Luego, con Distinto puso un par de banderillas dejando al novillo en los medios, citándolo andando hacia atrás y esperándolo en las tablas para clavar haciendo un quiebro. La suerte suprema la ejecutó con Califa, con el que antes puso tres banderillas cortas y se adornó con un sombrero que le tiró un aficionado. Dio un rejonazo fulminante en el centro del ruedo y fue premiado con los máximos trofeos.

Fotos: Carlos Núñez

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