Oreja para Ventura en el festival de Cantillana

24/02/2018
CANTILLANA
Oreja
Casa Prudencio
Demostración de oficio y de capacidad la de Diego Ventura hoy en Cantillana ante un novillo de Casa Prudencio, que se dejó sin más. Hubo de tirar el torero de su contrastado arsenal de recursos técnicos para superar la sosería del utrero y responder a la expectación del tendido. Recibió Diego al novillo a lomos de Guadalquivir, con el que hubo de llegar mucho a su oponente para encelarlo en la cabalgadura. Ya en banderillas, hizo coincidieron por vez primera en un mismo festejo Nazarí e Importante, padre e hijo, en lo que es la prolongación de una estirpe llamada a hacer historia. De hecho, Nazarí ya es historia viva del rejoneo. Importante tiene mimbres para serlo también. El tiempo será quien lo determine. En ambos casos, con Nazarí e Importante, salió a relucir el temple que palpita en ambos como si fuera un gen más, un don con el que se nace. Temple mayúsculo, extraordinario, del que se trae asido a la piel y corriendo por la sangre. El corolario de la faena fue una vez más con Remate, con el que Ventura terminó de abrochar una faena muy por encima de las opciones de su contrincante. La guinda, lo inesperado, la sorpresa preñada de derrochante belleza llegó en el novillo de sobrero que regalaron y torearon todos los actuantes, incluso, el maestro Manili, quien pasó de testigo a protagonista. Diego dejó fluir una vez más su pasión por el toreo a pie y se gastó un ramillete de muletazos hondos y de pellizcos, arrebatados y sutiles, gráciles y macizos, que encadilaron y apasionaron por igual al público presente. Es el toreo total, ése que se expresa sin límites ni parangón cuando se trata de Diego Ventura.