El rejoneo, al alcance de la gente

Hoy se ha alcanzado un nivel técnico casi perfecto, que sólo es posible desde el trabajo diario con los caballos
DIEGO VENTURA

A unas horas sólo del paseíllo de esta tarde en la Feria de San Pedro de Zamora, los tres rejoneadores protagonistas de la corrida de hoy se han encontrado en la misma plaza de toros con cientos de aficionados a quienes han presentado los caballos de su cuadra. Ha sido en el transcurso del acto de promoción organizado por la empresa Circuitos Taurinos que rige los destinos del coso zamorano. Sergio Galán, Diego Ventura y Joao Telles han aprovechado también la mañana para explicar las claves esenciales del arte de torear a caballo, lo que han expuesto desde la teoría, pero también a partir de la práctica, con la simulación de suertes que han llevado a cabo con sus caballos.

Cercanos y siempre a disposición de los espectadores –jóvenes y niños en su gran mayoría-, los jinetes les han acercado así a un arte tan desconocido en cuanto a sus resortes técnicos, que sorprende siempre por la plasticidad de la conjunción entre el hombre y el caballo, pero que termina de conquistar cuando se conoce en profundidad o, al menos, desde un mayor acercamiento, porque multiplica la sensación del aficionado de la complejidad que tiene el rejoneo y, por tanto, la valoración que ya quede sobre él. “Hoy se torea a la perfección. Se ha alcanzado un nivel técnico, de doma, de compenetración con los caballos y, como consecuencia, de hacer cada vez más cosas con ellos sencillamente impresionante. Es necesario, por tanto, que el público lo conozca y que valore todo lo que hay detrás de una tarde de rejones. Esto nada tiene que ver con lo meramente superficial que muchas veces –cada vez menos, afortunadamente- se traslada por simple desconocimiento, sino que entraña una complejidad técnica, de preparación y de capacidad que, cuando se expone a la gente, le sorprende y maravilla”, explica Diego Ventura.

Uno de los aspectos en los que más ha incidido el torero de La Puebla del Río es en la especial relación que establece con el caballo. “No hay nada en el mundo a lo que dedique más tiempo que a estar con ellos. Conociéndoles, entrenándoles, compenetrándome con ellos. No exagero en ningún caso si digo que paso más tiempo de mis días con los caballos que con mi familia. Pero es que es el único camino posible para luego ofrecer en la plaza lo que el público espera de ti. Y no es sólo ya la preparación, es también su cuidado, su alimentación, su sanidad, su bienestar. El dinero que un rejoneador invierte en su cuadra es ingente. Hay muchas personas formando parte de la estructura de un torero a caballo para estar pendiente de cada detalle de los animales. Ellos se convierten en el centro de nuestras vidas”, ha detallado Ventura al público zamorano para que, ya desde esta misma tarde, cuando vean la corrida de rejones en su plaza de toros, aprecien, entiendan y disfruten mucho más cuanto van a ver y cuanto hay detrás de lo que estén viendo.