Diego Ventura entusiasma a Alhaurin el Grande

Igual fuera de la plaza que dentro de ella, Diego Ventura conquista. En esta ocasión, al público de Alhaurin el Grande, en Málaga, con su testimonio en la charla que le tuvo como protagonista y que condujo el periodista Paco Aguado. El jinete de La Puebla del Río habló con pasión de su momento personal y profesional, la consecuencia de un camino largo y duro, "en el que la clave ha sido no desistir nunca. Creer y trabajar sin horas por conseguir aquello que yo sabía que tenía dentro". Ventura se reconoció "en plenitud", pero capaz también de alcanzar hitos más altos. "Un torero, como artista que es, no puede nunca conformarse ni acomodarse. Nosotros nos alimentamos de retos, de ponernos metas y superarlas. En mi caso, esta actitud es como el alimento de cada día. Me siento capaz de sacar aún más de mí y es eso lo que me motiva ahora". Invitado por la Peña El Estoque, Diego llenó por completa el salón de actos de la Biblioteca Municipal de Alhaurin el Grande, donde hizo parada de camino a Jaén para torear. Sincero y ameno, directo siempre, habló de su trayectoria, de su cuadra, del trabajo diario con ella, de los grandes caballos que ha tenido y que tiene, de la competencia con otros rejoneadores, del respeto máximo que le merecen los aficionados y de los grandes objetivos que sigue teniendo. Por supuesto, comprometido siempre con su profesión, se refirió al momento social que envuelve a la Tauromaquia para concluir que "nadie puede dar lecciones a un torero de lo que es respetar, proteger y querer a los animales. A quienes llegan hasta el extremo para agredir a sus semejantes en aras de una falsa defensa de los animales, les digo que lo primero que tienen que hacer es tratar a las personas como tratan ellos a los animales". Pero no sólo testimonios y palabras dejó Diego Ventura a su paso por la localidad malagueña -apoyado por varios vídeos con él como protagonista- sino también su más que probada generosidad al donar una de sus monturas que la Peña El Estoque sorteará para recaudar fondos con los que ayudar a la Asociación Pro Discapacitados Aprodal Alhaurin. Como en varios pasajes de su intervención, el público tributó una cerrada ovación final al rejoneador cigarrero, que dejó ecos a un tiempo de admiración y gratitud.